Los cambios de temperatura, la calefacción, la baja humedad del ambiente, el viento, junto con otros factores ambientales puede causar piel seca en invierno y que tu barrera cutánea se debilite, notando una sensación de tirantez constante.
Para evitar que tu piel llegue a ese estado de deshidratación te explicamos cómo preparar tu piel para el invierno manteniendo tu piel nutrida, hidratada y flexible.
¿Por qué tengo la piel seca en invierno?
La calefacción reduce la humedad del ambiente que, sumado al frío promueve la contracción de vasos sanguíneos y la reducción de la hidratación natural de la piel. Esta combinación crea un cóctel perfecto para una piel tirante, desnutrida y vulnerable, o dicho de otro modo, se vuelve tu piel seca en invierno.
Los 4 pilares de tu rutina de cuidado facial en invierno
Durante los meses fríos del año y con el objetivo de proteger tu piel, es fundamental cambiar tu rutina facial de invierno y enfocarla a la hidratación y la reparación de la piel.
1. Limpieza suave, sin agredir
Cambia tu limpiador por uno más suave, con textura más cremosa e hidratante. El ácido hialurónico y la niacinamida serán tus grandes aliadas este invierno para no agravar la piel seca.
2. Hidratación profunda y duradera
Busca un sérum con un alto poder hidratante (con ceramidas, ácido hialurónico o antioxidantes) para retener el agua de la piel durante más tiempo dejando la piel nutrida. La Niacinamida o vitamina B5 pueden ayudarte a reparar la barrera cutánea agredida.
3. Protección y reparación con texturas más ricas
Crea un escudo protector con una crema con textura más rica que selle la humedad de tu piel y la proteja frente a agresiones externas. Las ceramidas, manteca de karité o glicerina son ingredientes clave.
4. No olvidarse el protector solar
Aunque no lo notes, los rayos UVA siguen presentes y pueden dañar la estructura de tu barrera cutánea. Protege tu piel todo el año y ayuda a prevenir signos de envejecimiento.
Cuida tu cuerpo y tus manos del frío
Aunque la piel del cuerpo no esté tan expuesta como en verano, también necesita atención para evitar la piel seca en invierno. Usa geles de baño en crema o en aceite para un extra de nutrición después de la ducha y busca la mejor crema hidratante para invierno.
Por otro lado, los labios y las manos son los más expuestos todo el año y, por tanto, los más vulnerables. Usa bálsamo de labios nutritivo con frecuencia y aplícate cremas hidratantes para manos que hidraten y reparen, ayudándote a prevenir y tratar la sequedad y las grietas.
Deja tu piel lista para pasar el invierno
Con estos pequeños cambios en tu rutina notarás como tu piel se enfrenta de manera diferente al frío y los cambios de temperatura. Piel más sana, nutrida, sin tiranteces y, sobre todo ¡Sin molestias!
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